¿Eres un papá presente o ausente? Es el tema que vamos a platicar el día de hoy. En la antigüedad la figura paterna era muy fuerte, el papá era como un patriarca, a los hijos se les trataba en muchas ocasiones como siervos y la educación era basada en autoritarismo. En la época actual nos hemos ido al otro extremo, de tal forma que hay mucha ausencia de la figura paterna o hay muchas sobre protección. Esta ausencia es debida a diversos factores: por el trabajo, por actividades personales o realización personal, porque al papá también le interesa un círculo de amigos. Las condiciones han cambiado, si le preguntáramos a la mayoría de los papas si juegan con sus hijos, les puedo asegurar que la mayoría contestaría: No.
¿Qué significa ser un padre presente? Un padre presente está codo a codo con la mamá educando a los hijos, está presente tanto cuando los hijos están desocupados como cuando están haciendo su tarea, o con alguna otra ocupación, está presente cuando son platicadores, pero también cuando son taciturnos, están presentes cuando hay risas, pero también cuando hay tristezas. Es importante aclarar que no es lo mismo ser un padre presente, que un padre controlador.
Norma Revilla
Vamos a ver algunas recomendaciones que nos pueden ayudar para hacer un papá más presente;
La primera recomendación es: Pasar tiempo efectivo con nuestros hijos. Tiempo efectivo se refiere a tiempo de calidad, pero también con cierta cantidad, esa idea de pasar calidad con poca cantidad es una utopía, no se puede tener calidad sin un mínimo de cantidad.
¿Cómo podemos estar cerca de nuestros hijos si los conocemos poco o si los acompañamos poco en su desarrollo? Si hay una ausencia continua entonces no es posible tener calidad sin cantidad.
Este tiempo efectivo también debe ser aprovechado para planear actividades que ya queden programadas en tiempo y horas, para que precisamente tenga la familia una mejor estructura. También el tiempo efectivo tome en cuenta los intereses y las edades de nuestros hijos, esa la primera recomendación.
La segunda estrategia es: Escuchar mejor a tus hijos. Hay que dejarlos que se expresen aunque no estemos de acuerdo, tratar de no interrumpirlos, no sermonear, más bien si los queremos hacer reflexionar pues que sea a base de preguntas, aquel papá que desarrolle la habilidad de hacer preguntas inteligentes está del otro lado en la comunicación con sus hijos.
La tercera estrategia es: Cumplir promesas. Si quedamos en algún compromiso o en alguna consecuencia aplicarla, para un hijo es muy decepcionante que el papá quede de pasar por él y no llegue, o que quedaron el sábado de ir al cine y que no vayan. Es importante que el hijo confíe en que su papá va a cumplir sus promesas.
La cuarta estrategia es: Aplicar una disciplina efectiva. En cuestiones de la autoridad en casa, es clave el papel del papá, pero hay que aplicar una autoridad educativa. Vamos a dedicar un video especialmente para darles algunos tips y explicarles cómo mejorar la autoridad educativa. La disciplina efectiva tiene que ver con que los hijos tengan las reglas claras, consecuencias claras, límites claros, también tiene que ver con corregir sin humillar, con que el papá tenga prestigio antes sus hijos, es importante entonces saber aplicar una disciplina efectiva.
Y la última estrategia es: Ser un modelo a seguir para sus hijos. Hoy más que nunca en estos tiempos de confusión, es importante que el papá sea un modelo para sus hijos, hay que recuperar ese papel y hay que recuperar ese rol tan importante que tiene el papá en la familia.
Papás tienen un gran papel en su familia, aprovéchenlo y disfrútenlo.
Family Coaching
Pequeñas reflexiones para grandes familias
